La imagen más antigua de la actual Catedral de México*

Martha Fernández
marafermx@yahoo.com y marfer@unam.mx

 

 

El mapa de Uppsala

Una de las imágenes más importantes e intrigantes de la Ciudad de México en el siglo XVI es el conocido como Mapa de Uppsala, que la muestra con una vista aérea hacia el poniente; su interés radica en que no solamente representa la "ciudad española" que quedaba dentro de la traza que había realizado Alonso García Bravo, sino también los barrios de indios y la zona lacustre.

 

Mapa de Uppsala, https://www.loc.gov/resource/gdcwdl.wdl_00503

 

Antiguamente fue atribuido al cosmógrafo de Carlos V, Alonso de Santa Cruz, pero estudiosos como Manuel Toussaint[1] y Miguel León-Portilla[2] han mostrado que debió de haber sido pintado por artistas indígenas, posiblemente del Colegio de Santa Cruz de Tlatelolco.

En relación con su fecha de factura, Manuel Toussaint fue de la idea de que pudo haberse realizado entre 1556 y 1562 porque ya está dibujado el albarradón de San Lázaro, construido entre finales de 1555 y principios de 1556; además, ya se habían adquirido las casas nuevas de Moctezuma, que pertenecían a los descendientes de Hernán Cortes, para convertirlas en el palacio de gobierno; "casa de los virreyes", se escribió en el mapa.[3] Por su parte, para Miguel León-Portilla pudo haberse elaborado hacia el año de 1550, en vista de que la cartela en latín que se encuentra en la esquina inferior derecha del mapa parece referir que Alonso de Santa Cruz lo ofreció a Carlos V, denominado "César", cuando todavía era emperador.[4]

Hemos de reconocer que la representación de la ciudad española tiene imprecisiones o quizás anacronismos que dificultan su posible fechamiento. Faltan edificios como, por ejemplo, el palacio arzobispal, que se había establecido en la actual calle de Moneda desde el año de 1530 cuando el obispo fray Juan de Zumárraga compró las primeras dos casas que adaptarían para el efecto[5] o el Hospital del Amor de Dios, que también había fundado el obispo Zumárraga en 1539,[6] sobre la misma calle de Moneda. También está ausente el convento de monjas de la Concepción, que había sido fundado en 1540.[7] En cambio, existen otros como "S. Lázaro", ubicado en el ángulo suroeste de la traza que se presta a confusión, pues según la historia, el primer hospital de ese nombre para atender a los pacientes de lepra se fundó entre 1521 y 1524 en un sitio llamado la Tlaxpana, pero ese hospital fue destruido por el oidor Nuño de Guzmán hacia el año de 1528[8] y no fue sino hasta 1572 cuando se abrió un nuevo hospital de San Lázaro, gracias al doctor Pedro López,[9] pero no ya en ese sitio sino precisamente al otro lado de la ciudad, en el extremo oriente, cerca de las atarazanas, donde todavía subsiste, en ruinas, parte de la iglesia reconstruida aproximadamente entre 1721 y 1728 por el arquitecto Miguel Custodio Durán.

 

Convento de Santa Clara en el mapa de Uppsala, https://www.loc.gov/resource/gdcwdl.wdl_00503 (detalle)

 

Da la impresión de que el mapa que nos ocupa se fue haciendo poco a poco a lo largo de varios años y no se fue actualizando del todo. Sin embargo, existe una pequeña iglesia en la actual calle de Moneda que tiene debajo el nombre de "S. Clara", lo que nos indica que el mapa no pudo haberse terminado antes de 1568. En efecto, de acuerdo con el manuscrito de fray Antonio de la Rosa Figueroa, titulado Crónica sucinta del Convento de Santa Clara de México del año de 1753, citado por Josefina Muriel, el mencionado año de 1568, el cabildo de la ciudad concibió la idea de fundar un nuevo convento de monjas, pues en aquel tiempo sólo existía el de la Concepción. El arzobispo Alonso de Montúfar aplaudió la idea y cedió a los franciscanos para ese fin "una ermita que estaba en poder de la cofradía de la Santísima Trinidad que formaban los sastres, jubeteros y calceteros de la ciudad" ubicada en la calle mencionada. Por su parte, Alonso Sánchez y su esposa Francisca Galván, ofrecieron una casa contigua a esa ermita para el establecimiento del convento. La bula para la fundación llegó en 1570 y, en medio de los conflictos provocados por la oposición de los frailes franciscanos, las monjas profesaron el 22 de noviembre de 1573. Una vez resueltos los problemas de jurisdicción del convento entre el arzobispo y los mendicantes, el año de 1578 las monjas pasaron a su nuevo monasterio de la calle de Tacuba.[10] Es decir, que las monjas clarisas estuvieron en su casa de la calle de Moneda de 1568 a 1578; lo que significa que el autor del mapa ya lo conoció en ese lugar para poder representarlo.

 

 

La Catedral de México en el mapa de Uppsala

La primera catedral

En cuanto a la "Iglesia maior" representada en el mapa de Uppsala, los estudiosos han considerado que se trata de la primera, la más antigua, construida por Martín de Sepúlveda en 1525. Revisemos entonces su historia y sus características.

 

Imagen de la primitiva Catedral de México antes de su remodelación, AGI (MP-MÉXICO, 3)

 

Como se observa en el plano de la Plaza Mayor de México del año 1562-1566, resguardado en el Archivo General de Indias,[11] estaba colocada de oriente a poniente con la portada principal hacia la plaza del marqués y el ábside hacia el palacio real, por lo que, en el plano citado, la fachada que mira a la plaza mayor es la sur. Su imagen es la de un edificio rectangular de piedra con los sillares bien definidos; su portada principal es arquitrabada y tiene como remate un friso limitado por un par de roleos; se alcanza a ver una puerta –seguramente de madera– cerrada. En tanto que la portada sur tiene un arco de medio punto, sobre el que se levanta un nicho vacío, limitado igualmente por un par de roleos. Hacia la parte posterior de templo se levanta una espadaña con una campana. El interior era de tres naves y estaba techada de madera; la nave central tenía armadura de media tijera y las laterales, vigas horizontales. Ésa fue la catedral que conoció Francisco Cervantes de Salazar y a la que se refirió en sus famosos Diálogos de 1554 cuando escribió, "da lástima que en una ciudad a cuya fama no sé si llega la de alguna otra, y con vecindario tan rico, se haya levantado en el lugar más público un templo tan pequeño, humilde y pobremente adornado".[12]

Esa catedral se comenzó a remodelar el año de 1584 y sólo se conoce el nombre del arquitecto Melchor Dávila quien inició los trabajos, pero no los pudo terminar debido que falleció el 12 de diciembre de ese mismo año. De acuerdo con varios documentos recogidos por Manuel Toussaint, la portada principal o del Perdón fue levantada por el cantero Martín Casillas y los oficiales de cantería Alonso Pablo, Juan de Arteaga y Hernán García de Villaverde. Sobre la puerta, se abrían tres ventanas redondas "con vidrieras enceradas" realizadas por Nicolás de Texada; en las de los lados, se encontraban las imágenes de San Pedro y San Pablo y en la central, la imagen de Nuestra Señora, que el arzobispo mandó quitar por decir que era indecente que estuviera en ese lugar y, al parecer, la envió a la sacristía. La portada tenía una reja que se mandó ensanchar al herrero Gaspar de los Reyes.[13]

 

Portada del Perdón de la primitiva Catedral de México, hoy en el Hospital de Jesús. Foto: Martha Fernández

 

Al demolerse esta antigua iglesia mayor el año de 1625, esa portada, se trasladó a la iglesia del convento de monjas carmelitas de Santa Teresa la Antigua,[14] la cual fue reconstruida por el arquitecto Cristóbal de Medina Vargas de 1678 a 1684,[15] de manera que en 1691 se contrató al arquitecto Juan Durán para retirar aquella antigua portada y llevarla al hospital de Jesús, donde se conserva como ingreso de su iglesia.[16]

 

Imagen de la primitiva Catedral de México después de su remodelación, AGI (MP-MÉXICO, 47)

 

La fachada sur de la primitiva Catedral, ya remodelada, está representada en un plano de la plaza mayor, fechado el año de 1596 y conservado en el Archivo General de Indias.[17] En él se ve una puerta arquitrabada, con los sillares definidos, sobre la que se abren cinco ventanas redondas, que quizá también tuvieran encerados con pinturas. En el extremo oriente se levanta una torre, posiblemente redonda, con tres ventanas y un cuerpo de campanas rematado por un chapitel, sobre el que se apoya una cruz.

 

Catedral de México en el mapa de Uppsala, https://www.loc.gov/resource/gdcwdl.wdl_00503 (detalle)

 

En el mapa de Uppsala, encontramos la imagen de una "Iglesia Maior", muy diferente a la anteriormente descrita. Primero la orientación, pues se encuentra ubicada más o menos de norponiente a suroriente, casi invertida, respecto a catedral a la que me he referido. Da la impresión de que el pintor quiso ubicarla más bien de frente a la plaza, pues carecería de lógica que la hubiera representado en sentido opuesto a la orientación litúrgica. Su portada está constituida por una puerta de medio punto que tiene alrededor pequeñas señales, quizá indicando sillares. Sobre ella, dos ventanas ajimezadas, gotizantes. Remata la portada un frontón semicircular con agujas que tiene al centro del tímpano una señal como para poner un relieve. En el muro oriente se aprecian dos grandes vanos de medio punto a manera de ventanales. La iglesia se encuentra limitada por cuatro torres de planta circular.

 

 

Los proyectos para la nueva catedral

Entonces habría que preguntarse cuál es esa "Iglesia maior" representada en el mapa de Uppsala y para ello, recordemos el proceso de elaboración del proyecto para construir la nueva Catedral de México, es decir, la actual. Su historia comenzó cuando el año de 1554 el arzobispo Alonso de Montúfar escribió al rey Felipe II que "con la ayuda de Dios Nuestro Señor, el señor virrey y yo queremos comenzar la iglesia: la traza que se ha elegido es la de Sevilla, porque S. M. por su real cédula manda se haga muy suntuosa como a ciudad e iglesia metropolitana conviene" y agregó además que, en vista de que "el sitio de la iglesia es isleta que cercan cuatro calles principales, que en cada cantón se hiciese una torre y así estaría metida la iglesia en su claustro dentro de cuatro torres".[18] Pretendía entonces don Alonso de Montúfar que la Catedral tuviera siete naves, como la iglesia hispalense que le sirvió de modelo, un claustro y cuatro torres. Estaría desplantada, como la primitiva catedral, de oriente a poniente.

La cimentación se comenzó el año de 1562, pero el subsuelo de la ciudad, fundada entre dos lagunas, provocó que los cimientos se hundieran, por lo que el año de 1565, decidieron abandonar ese planteamiento. Hacia el año de 1566, el propio arzobispo informó al rey que como la iglesia se tenía que construir sobre agua, no podía ser tan grande como la de Sevilla, de manera que proponía que se construyera más pequeña, como las de Segovia o Salamanca. Y además le solicitó que enviara "la traza que fuere servido y algún buen maestro que acá no hay".[19]

De todas formas, el arquitecto Claudio de Arciniega estuvo trabajando en un nuevo proyecto, posiblemente desde 1565 en que se suspendió la cimentación de la catedral de siete naves, puesto que en 1567 la envió a España con el doctor Sancho Sánchez de Muñón.[20] Dos años más tarde, por una cédula emitida en el Pardo el 4 de mayo de 1569, el rey Felipe II determinó que si se tenían tantos problemas para construir un templo tan grande, se edificara como mejor conviniera, techada de madera porque "los edificios de bóvedas altos corren riesgo", se consultara "con las personas expertas que os pareciere" y se construyera "poco a poco… porque una obra tan grande no conviene hacerse de golpe".[21]

Con base en esas instrucciones, el virrey Martín Enríquez de Almanza acordó el 15 de febrero de 1570 que la nueva iglesia

 

se plante y edifique en el lugar donde están los portales de Lerma, tomando de la Plaza pequeña que está delante de las casas del Marqués del Valle,[22] lo que pareciere ser necesario a la disposición de S. Exa., e de esta Real Audiencia, Norte Sur, poniendo la puerta del Perdón hacia la Plaza Mayor, y el campanario a la cabeza de la dicha iglesia que se hubiere de hacer… e que sea de tres naves claras y a los lados de ellas sus capillas colaterales, que todo se cubra de madera.[23]

 

Fue así como se decidió levantar la nueva catedral en el sitio en el que hoy se encuentra, una plataforma artificial construida por los mexicas conocida con el nombre de "Isla de los Perros"; orientada de norte a sur, con sólo cinco naves cubiertas de madera, con su portada principal hacia la Plaza Mayor y un campanario en el ábside (a la manera, por cierto, de la Giralda que se levanta en la cabecera de la Catedral de Sevilla).

 

Plano de la Catedral de México atribuido a Claudio de Arciniega. Col. Particular. Foto: Archivo Fotográfico "Manuel Toussaint", Instituto de Investigaciones Estéticas, UNAM

 

 

El proyecto de Claudio de Arciniega, lo conocemos gracias a un plano que se le atribuye[24] y a un informe que el arquitecto Juan Gómez de Trasmonte escribió entre 1635 y 1640, publicado por Luis G. Serrano.[25] La catedral que concibió Arciniega fue la de una basílica de cinco naves, con el ábside semi hexagonal; salvo el presbiterio que tendría bóvedas de nervaduras a la manera gótica, el templo estaría techado con madera y no tendría cúpula. Las tres naves centrales estarían a la misma altura, de manera que la nave mayor recibiría la luz desde los muros de las naves procesionales; las naves de capilla estarían un poco más bajas y tendrían ventanas que las iluminarían desde el exterior. Pero Arciniega no abandonó del todo el proyecto del arzobispo Alonso de Montúfar, quien todavía ocupaba la cátedra, de manera que, en lugar de una torre, como lo había propuesto el virrey, contempló cuatro, una en cada esquina y, además, abrió siete puertas, como las que tiene la Catedral de Sevilla. La construcción dio inicio el año de 1573.

 

 

Conclusiones

Si el mapa de Uppsala no pudo haberse concluido antes de 1568, quiere decir que para entonces el autor ya conocía los dos proyectos para construir la nueva Catedral (el de Montúfar y el de Arciniega).

 

Catedral de México. Foto: Martha Fernández

 

A ello agregamos que, la posición oblicua de la Catedral en el mapa de Uppsala da la impresión, como apunté antes, de desplantarse de frente a la plaza, lo que sin duda la acerca a las instrucciones del virrey Enríquez de Almanza y al proyecto de Claudio de Arciniega. Pero, como también comenté, este arquitecto no abandonó la propuesta del arzobispo Montúfar y por eso abrió siete puertas y preparó los cimientos para levantar cuatro torres, lo que quizás explique también el aspecto arquitectónico de la "Iglesia maior" dibujada en el mapa, pues parece ser el de una catedral gótica, como es la de Sevilla que le había servido de modelo al prelado. No porque Arciniega la pretendiera construir de esa manera, sino porque ése era el diseño que se conocía y se tenía presente, y era también el que conocía el autor del mapa cuando dibujó la catedral, lo que pudo suceder tal vez entre 1570, en que el virrey emitió las indicaciones para su construcción ya de norte a sur y 1573 en que dio inicio su fábrica.

Todo lo cual me lleva a concluir que la imagen de la "Iglesia maior" que se representa en el mapa de Uppsala no es la de la primitiva Catedral de México, como se supuso siempre, sino la de la nueva Catedral, la actual, de frente a la plaza, con sus siete puertas y sus cimientos preparados para edificar cuatro torres. Es una imagen que se aleja del aspecto que adquirió el templo después de casi tres siglos de construcción, pero, si mi hipótesis es correcta, ese dibujo resultaría ser la primera y más antigua imagen que conocemos de la actual Catedral de México, cuando apenas se definían su ubicación y su diseño y, por lo mismo, todavía dando fe de los dos proyectos que le dieron origen.

 

 

 

Inserción en Imágenes: 15 de noviembre de 2023

 


[1] *Este trabajo lo presenté con el título de “La imagen de la Catedral de México en el mapa de Uppsala” como ponencia en el Congreso Internacional VIII Centenario Catedral de Burgos. “El mundo de las catedrales”, organizado por la Universidad de Burgos, España, celebrado del 13 al 16 de junio de 2022 y fue publicado en las Actas: Congreso Internacional VIII Centenario Catedral de Burgos. El mundo de las catedrales. Pasado, presente y futuro (Burgos: Fundación VIII Centenario de la Catedral, 2022), 847-855. Enlace: https://catedrapatrimonioubu.com/congresos. Sin embargo, me pareció conveniente presentar un resumen de ese trabajo por el interés que se ha tenido siempre en el mapa y, por supuesto, en la historia constructiva de la Catedral de México.

Manuel Toussaint, Federico Gómez de Orozco y Justino Fernández, Planos de la ciudad de México. Siglos XVI y XVII, 1a. reimp. (México: XVI Congreso Internacional de Planificación y de la Habitación, 1990), 140-142.

[2] Miguel León-Portilla y Carmen Aguilera, Mapa de México-Tenochtitlan y sus contornos hacia 1550 (México: Celanese Mexicana, 1986), 29-31.

[3] Toussaint, Gómez de Orozco y Fernández, Planos, 142.

[4] León-Portilla y Aguilera, Mapa, 29-31.

[5] José María Marroqui, La Ciudad de México. Contiene: el origen de los nombres de muchas de sus calles y plazas, del de varios establecimientos públicos y privados, y no pocas noticias curiosas y entretenidas, 3 t., 2a. ed. facsimilar (México: Jesús Medina Editor, 1969), I, 468.

[6] Josefina Muriel, Hospitales de la Nueva España, 2 t., 2a. ed. (México: Universidad Nacional Autónoma de México, Cruz Roja Mexicana, 1990), I, 156.

[7] Josefina Muriel, Conventos de monjas en la Nueva España, 2a. ed. (México: Editorial Jus, 1995), 32.

[8] Muriel, Hospitales, I, 51-52.

[9] Muriel, Hospitales, I, 249-250.

[10] Muriel, Conventos, 168-173.

[11] Archivo General de Indias, Sevilla, España, en adelante AGI, MP-MÉXICO, 3.

[12] Francisco Cervantes de Salazar, México en 1554 y Túmulo Imperial, ed., pról. y notas Edmundo O’Gorman. (México: Editorial Porrúa, 1985), 47.

[13] Manuel Toussaint, “La primitiva catedral de México”, en Artemio del Valle Arizpe. Historia de la Ciudad de México según el relato de sus cronistas (México: Editorial Pedro Robredo, 1939), 266-271.

[14] María Concepción Amerlinck, “El convento de San José y su iglesia de Santa Teresa la Antigua: sus arquitectos, artistas y artesanos”, en El monacato femenino en el Imperio Español: monasterios, beaterios, recogimientos y colegios (México: Centro de Estudios de Historia de México-Condumex, 1995), 447-495.

[15] Martha Fernández, Cristóbal de Medina Vargas y la arquitectura salomónica en la Nueva España durante el siglo XVII (México: UNAM-Instituto de Investigaciones Estéticas, 2002), 247-258.

[16] Guillermo Tovar de Teresa, “La portada principal de la primitiva Catedral de México”, en Xavier Cortés Rocha, Martha Fernández, Armando Ruiz Castellanos y Jaime Salcedo, eds., La Catedral de México (México: Fundación BBVABancomer, 2014), 79.

[17] AGI, MP-MÉXICO, 47.

[18] Mariano Cuevas, Historia de la Iglesia en México, 3 t., 3ª ed. (El Paso, Texas: Editorial Revista Católica, 1928), III, 47.

[19] Cuevas, Historia, III, 48.

[20] Manuel Toussaint, La Catedral de México y el Sagrario Metropolitano. Su historia, su tesoro, su arte, 2a. ed. (México: Porrúa, 1973), 32.

[21] Archivo General de la Nación de México, en adelante AGN, Reales Cédulas Duplicados, v. 47, fs. 408-409, reproducida por Toussaint, La Catedral, 265-266.

[22] Las casas del Marqués del Valle eran las de Hernán Cortés, con todas las modificaciones sufridas a lo largo del tiempo, se encontraban en la actual sede del Nacional Monte de Piedad y la Plaza a la que se refiere, hoy lleva el nombre de Talabarteros.

[23] AGN (Reales Cédulas Duplicados, vol. 47, fs. 427 r.- 427 v.), reproducida por Manuel Toussaint, La Catedral, 27-28, 267-268.

[24] Conservado en una colección particular.

[25] Luis G. Serrano, La traza original con que fue construida la Catedral de México por mandato de su majestad Felipe II (México: UNAM-Escuela Nacional de Arquitectura, 1964), láms. 12 a-12h.