María Olga Sáenz González: una semblanza

Julieta Ortiz Gaitán*
ortizgjulieta@gmail.com

 

Olga Sáenz y Martha Fernández, Lima, Perú, 2011. Foto: Archivo de Julieta Ortiz Gaitán.
 

EL 3 DE MARZO PASADO falleció en la ciudad de Mérida, Yucatán, Olga Sáenz González, quien fuera distinguida investigadora del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE) y maestra de varias generaciones de estudiantes en el campo del arte moderno y contemporáneo mexicano y mundial.

La doctora Olga Sáenz nació en la Ciudad de México. Cubrió los estudios de licenciatura en Historia del Arte por la Universidad Iberoamericana y asumió los grados de maestra y doctora en Historia del Arte por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México. Realizó estudios de posgrado y especialización en la Università di Roma I, La Sapienza, y en la Università degli Studi di Bologna, donde posteriormente participó en diversos cursos y eventos académicos. Ingresó como investigadora al Instituto de Investigaciones Estéticas en 1984, institución en la que desarrolló una larga y fructífera trayectoria dedicada a la investigación, la docencia y la divulgación de la cultura.

Es en el ámbito efervescente y vital del arte de principios del siglo XX donde Olga Sáenz desarrolló sus principales líneas de investigación, ante todo en temas fundamentales relacionados con las vanguardias históricas y su liga con el arte de nuestro país. Sus principales publicaciones presentan estos puntos de interés que se inician en su primer libro publicado por el IIE: Giorgio de Chirico y la pintura metafísica, aparecido en la serie Monografías de Arte (19) en 1990. En El futurismo italiano, publicado por el Instituto en 2010, la investigadora realizó una compilación exhaustiva de manifiestos y documentos relativos al movimiento que, como es sabido, contó con la participación activa y entusiasta de literatos, poetas y artistas visuales que ampliaron y enriquecieron postulados preeminentemente políticos. En el libro El símbolo y la acción. Vida y obra de Gerardo Murillo, Dr. Atl, publicado por El Colegio Nacional en 2016, profundizó en el pensamiento anarquista y revolucionario de la época; asimismo, concentró especial interés en describir el intenso periodo formativo del inquieto pintor mexicano en el ambiente artístico e ideológico italiano.
 

Olga Sáenz, Juan Ramón de la Fuente y Julieta Ortiz Gaitán. Foto: Archivo de Julieta Ortiz Gaitán.
 

Numerosas fueron las colaboraciones de Olga Sáenz en capítulos de libros especializados, en memorias de coloquios, en artículos en revistas indexadas, tanto nacionales como internacionales. Fundamentales son sus materiales en dos libros del seminario La Enseñanza del Arte en México, coordinado por el doctor Aurelio de los Reyes a partir de 2004. Olga Sáenz tuvo a su cargo los estudios en torno a “La enseñanza en la Escuela Nacional de Bellas Artes, 1901-1920” y sobre “La disputa de Antonio Rivas Mercado y Gerardo Murillo, Dr. Atl, por la enseñanza del dibujo”, aparecidos en La enseñanza del arte en México (Instituto de Investigaciones Estéticas) y en La enseñanza del dibujo en México (Universidad Autónoma de Aguascalientes). Una tercera colaboración en el seminario quedó finalizada para el tercer tomo de La enseñanza del arte en México, libro que se encuentra en proceso de edición.

Como editora tuvo a su cargo la coordinación de dos trabajos centrales de la producción editorial relativa a la narración y el registro de la historia del coleccionismo de obras de arte y sobre la relación de la ciencia con el arte. Se trata de la obra fundamental titulada México en el mundo de las colecciones de arte, 7 volúmenes, de la Editorial Azabache, publicación de 1994. De igual manera, fue básica su colaboración en Palas y las musas: diálogos entre la ciencia y el arte, seis volúmenes publicados por Siglo XXI Editores en 2017. Cabe mencionar que en esta última producción participó con varios textos básicos; entre ellos el titulado “La mirada científica de Paul Cézanne”, en coautoría con Pablo Padilla. Esta obra notable obtuvo el premio CANIEM al Arte Editorial del año 2017.

La doctora Sáenz participó en numerosos coloquios, mesas redondas y conversatorios y dictó conferencias, cursos y diplomados, tanto en México como en el extranjero. Llevó a cabo una interesante labor periodística publicando artículos en El Universal y en la revista Plural.

Su acucioso pensamiento se ocupó del arte del tumultuoso siglo XX y transmitió sus conocimientos e información a alumnos y tesistas con quienes borraba las fronteras estrictas de la cátedra para apoyarlos y orientarlos cuantas veces fuera necesario. Fue maestra, colega y amiga afectuosa; su gran sentido del humor no interfería con el tono crítico ni la intensidad de su perspectiva ante los asuntos fundamentales de la vida y del trabajo académicos.
 

Elisa García Barragán y Olga Sáenz, Lima, Perú, 2011. Foto: Archivo de Julieta Ortiz Gaitán.
 

Los temas de sus investigaciones los llevó a la cátedra y sus clases giraron en torno a las vanguardias, a la pintura metafísica, al futurismo, el movimieto dadá y el surrealismo. En cuanto al arte en México, se ocupó del arte popular, de la obra de José Guadalupe Posada, del pintor y arquitecto Juan O’Gorman, del ya mencionado Dr. Atl y, como buena discípula de Ida Rodríguez Prampolini, conservó siempre una decidida pasión por los muralistas mexicanos y el arte de la muy revisitada, decodificada, reinterpretada y deconstruida Escuela Mexicana de Pintura.

Su labor docente la llevó a una continua impartición de cátedras y seminarios, así como a la dirección, asesoría y lectura de tesis, con su consecuente participación en los sínodos correspondientes. Organizó y dio cursos en la Universidad de Sonora, la Universidad Nacional de San Marcos, de Lima, Perú, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, el Museo Nacional de Arte Popular, el Museo Nacional de Arte, el Museo Soumaya y, principalmente, la Facultad de Filosofía y Letras y la Facultad de Artes y Diseño, ambas de su casa académica, la Universidad Nacional Autónoma de México.
 

Gustavo Curiel, Aurelio de los Reyes y Olga Sáenz. Foto: Archivo fotográfico del Instituto de Investigaciones Estéticas, UNAM.
 

El sentido de lo que consideraba un compromiso inherente a la actividad universitaria la llevó a integrarse a múltiples cuerpos colegiados. Relevante fue su activa participación como consejera en el Consejo Universitario (2007-2011), el Consejo Técnico de Humanidades (2021-2016) y el Consejo Interno del Instituto de Investigaciones Estéticas (2014-2016). Asimismo, fue integrante de comisiones dictaminadoras, comités académicos, comités de admisión al posgrado en Historia del Arte de la Facultad de Filosofía y Letras y de la Facultad de Artes y Diseño de la UNAM.

Cabe destacar su desempeño en el ámbito académico administrativo donde tuvo a su cargo la Coordinación del Departamento de Bienes Artísticos y Culturales de la Dirección General del Patrimonio Universitario de la UNAM, en 1978; el Departamento de Investigación y la Subdirección del Museo Nacional de Arte del Instituto Nacional de Bellas Artes, de 1986 a 1988, y la Dirección del Patronato y Colecciones del Instituto Veracruzano de Cultura, de 1989 a 1991. También fue curadora del Museo Nacional de Arte Popular entre 1999 y 2000.

Dueña de una gran y notable disciplina, Olga Sáenz vivió intensamente las variadas facetas de su labor académica y aprendió a compartir momentos de agradable convivencia en los que su actitud entusiasta, su risa alegre y estimulante y sus comentarios chispeantes, llenos de humor e ironía, alentaban conversaciones siempre amenas e inteligentes. Su trato refinado, con todo, no ocultaba su gran fuerza de voluntad para salir adelante en los grandes desafíos de la vida, ni tampoco la firmeza evidente de sus convicciones.
 

Julieta Ortiz Gaitán y Olga Sáenz. Foto: Archivo fotográfico del Instituto de Investigaciones Estéticas, UNAM.
 

Nuestro acercamiento en el IIE comenzó con las consultas que juntas hicimos al Archivo de José Guadalupe Zuno, en Guadalajara. Entonces iniciamos una relación de trabajo que muy pronto se convirtió en amistad entrañable y nos llevaría a otras memorables consultas como la que realizamos en la Biblioteca Nacional de Francia. Fuimos compañeras en seminarios, cursos, ponencias y diversos eventos académicos. En el terreno de la docencia fungimos como tutoras, asesoras y sinodales en numerosas tesis de posgrado en las que compartimos la responsabilidad académica contraída con los tesistas.

Fueron muchos y diversos los lazos de unión entre Olga y compañeros del Instituto y otros colegas historiadores. Los unió una vocación apasionada por el arte y su historia y por la belleza en las diversas expresiones de la creación artística. De igual modo los unió su entrega a las actividades docentes y una devoción por la UNAM, institución a la que la doctora Sáez siempre perteneció, incluso cuando se trasladó por motivos de salud al Centro Peninsular en Humanidades y Ciencias Sociales de la UNAM, en Mérida, Yucatán. Allí dejó inconcluso el proyecto “Felipe Carrillo Puerto y la educación racionalista”.

Como parte del espíritu refinado que la animó, Olga supo comprometerse con aquellas causas que consideró justas y propicias para un mejoramiento social por medio de la educación, la investigación y la difusión de la cultura. Nuestra participación en el seminario del doctor Aurelio de los Reyes y la convivencia cotidiana de más de treinta años nos acercó aún más y hace que estas líneas sean a todas luces insuficientes para expresar la profunda tristeza que me causa su partida. Sin embargo, las escribo con la intención sincera de que constituyan un esbozo testimonial de su obra y un reconocimiento a su memoria. Estoy segura de que muchos colegas del Instituto de Investigaciones Estéticas avalan estas líneas.

Marzo de 2021. I
 

Olga Sáenz. Foto: Archivo fotográfico del Instituto de Investigaciones Estéticas, UNAM. 

 

*Doctora en Historia del Arte por la UNAM. Estuvo adscrita al Instituto de Investigaciones Estéticas, donde fue coordinadora del Archivo Histórico Documental.

 

Inserción en Imágenes: 20 de marzo de 2021.

Imagen de portal: Olga Sáenz. Foto: Archivo fotográfico del Instituto de Investigaciones Estéticas, UNAM.

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